Madres buscadoras, el corazón de la lucha contra las desapariciones en México


ONU-DH reconoce su papel y llama a fortalecer su protección
En el marco del Día de las Madres, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) reiteró la urgencia de enfrentar la crisis de desapariciones en México, subrayando la lucha de las madres buscadoras como símbolo de resistencia y dignidad frente a la impunidad. Aunque el organismo internacional reconoció la disposición al diálogo de la presidenta Claudia Sheinbaum, también dejó claro que las palabras deben convertirse en políticas públicas eficaces.
“La fuerza de las madres buscadoras es una fuente de luz ante una de las violaciones más graves a los derechos humanos”, expresó la ONU-DH en un comunicado. El organismo valoró que la presidenta haya declarado como prioridad nacional el problema de las desapariciones, pero advirtió que el reto exige medidas inmediatas, estructurales y sostenidas.
El llamado de la ONU-DH incluye un decálogo de acciones prioritarias que van desde garantizar la participación de las familias en los procesos de búsqueda, hasta reforzar las capacidades forenses, proteger a las personas buscadoras y cumplir con las recomendaciones internacionales pendientes. Además, urgió a investigar con rigor los delitos relacionados con las desapariciones y a implementar una estrategia nacional de prevención.
Madres buscadoras, faro de dignidad: ONU-DH urge a Claudia Sheinbaum a traducir diálogo en acciones concretas
Organizaciones de derechos humanos han señalado que, pese a los avances en el discurso oficial, persisten obstáculos para las familias que buscan a sus seres queridos, incluyendo omisiones institucionales, amenazas y falta de coordinación entre niveles de gobierno.
En ese contexto, la ONU-DH recordó que “el diálogo solo es útil si deriva en soluciones reales”, y enfatizó que el acompañamiento a las víctimas no puede limitarse a fechas conmemorativas. Este 10 de mayo, el organismo participará en diversas actividades encabezadas por colectivos de madres, y llamó a la sociedad mexicana a sumarse solidariamente a su lucha.
Con más de 110 mil personas desaparecidas registradas oficialmente en México, las madres buscadoras han asumido la tarea que corresponde al Estado, caminando por desiertos, fosas y montañas con palas y esperanza como única herramienta. Hoy, su clamor resuena con más fuerza: no hay nada que celebrar, mientras no haya verdad y justicia.