Cámara de Diputados aprueba reforma que elimina siete organismos autónomos
El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó este jueves la reforma constitucional en materia de simplificación administrativa, que contempla la desaparición de siete organismos autónomos. La iniciativa, enviada por el Ejecutivo Federal, fue avalada tras modificaciones que incluyen la creación de una agencia antimonopolios y la corrección de un error previo relacionado con la regulación del litio.
Debate intenso y críticas de la oposición
Durante la sesión, el legislador panista Federico Döring criticó el proceso legislativo, señalando que las modificaciones se hicieron de manera apresurada. “Es que esta bola de sicarios legislativos hacen todo sobre las rodillas. Ahora, bajo el pretexto del exterminio del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), quieren corregir el error que cometieron al dejar fuera el litio en la reforma del 30 de octubre”, afirmó Döring.
El legislador también cuestionó la forma en que la mayoría oficialista ha manejado las reformas recientes, acusándolos de improvisación y falta de rigor técnico.
Modificaciones clave
Entre los cambios realizados destaca la creación de una agencia antimonopolios, que asumirá algunas funciones previamente en manos del Instituto Federal de Telecomunicaciones y otros organismos que desaparecerán. También se incluyó una cláusula para subsanar las omisiones en la regulación del litio, considerado un recurso estratégico para el país.
Cámara de Diputados aprueba reforma que elimina siete organismos autónomos
Paso al Senado
La minuta aprobada ahora será turnada al Senado de la República, donde será analizada y discutida. De ser avalada, marcará un cambio significativo en la estructura administrativa del país, eliminando organismos autónomos bajo el argumento de reducir costos y simplificar procesos burocráticos.
Un cambio controvertido
Mientras el oficialismo defiende la reforma como un avance hacia una administración más eficiente, la oposición advierte que suprime contrapesos esenciales en áreas clave como telecomunicaciones, competencia económica y derechos ciudadanos. La discusión en el Senado será crucial para determinar el futuro de esta reforma, que ha generado una fuerte polarización en el ámbito político y social.