Venta de comida chatarra en escuelas de México: nueva prohibición en 2025
En un esfuerzo por mejorar la alimentación y salud de los estudiantes, la venta de comida chatarra en escuelas de México será prohibida a partir de marzo de 2025. Esta medida, presentada por Mario Delgado Carrillo, secretario de Educación Pública (SEP), busca reducir los índices de obesidad infantil y juvenil en México.
Nuevas medidas para prohibir la venta de comida chatarra en escuelas
Con la nueva estrategia de salud en escuelas, los nuevos lineamientos establecidos por la SEP y la Secretaría de Salud prohíben la venta de alimentos ultraprocesados en los espacios escolares. El objetivo es crear ambientes que favorezcan una alimentación nutritiva y saludable. La medida forma parte de la Nueva Escuela Mexicana (NEM), que también impulsa cambios en los hábitos alimenticios a través de la educación.
El impacto de la venta de comida chatarra en las escuelas
Delgado Carrillo informó que durante un monitoreo realizado durante el ciclo escolar 2023-2024, se detectó que el 98% de las escuelas vendían comida chatarra; un 95% ofrecía bebidas azucaradas; 79% refrescos; 77% había venta externa de comida chatarra, y un 25% había publicidad de comida chatarra. Estas estadísticas alarmantes reflejan la magnitud del problema de la mala alimentación en las escuelas del país, que ha sido vinculada al creciente índice de obesidad entre los estudiantes.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSATU) 2020-2023 reveló que 5.7 millones de niños de 5 a 11 años y 10.4 millones de adolescentes de 12 a 19 años padecen de obesidad.
¿Cómo se aplicará la prohibición de la venta de comida chatarra en las escuelas?
Los nuevos lineamientos de la SEP entrarán en vigor en marzo de 2025, en todas las escuelas del Sistema Educativo Nacional (SEN), desde nivel básico hasta superior. Esta nueva estrategia de salud en escuelas no solo prohibirá la venta de comida chatarra, sino que también promoverá una serie de acciones para fomentar estilos de vida más saludables en los estudiantes. Estas incluyen la promoción del consumo de agua natural y la capacitación del personal de las cooperativas escolares para ofrecer alimentos locales y de temporada.
8 acciones para fomentar la salud alimentaria en escuelas
Mario Delgado Carrillo, expuso los nuevos lineamientos y acciones de Vida Saludable en las escuelas. Estas establecen 8 acciones prioritarias:
- Impedir la venta de alimentos ultraprocesados y con bajo valor nutricional en espacios escolares.
- Promover el consumo de agua natural en las escuelas. Se orientará a madres y padres de familia para que a través de La Escuela es Nuestra (LEN), se instalen bebederos en los planteles.
- Capacitar a las autoridades y personal responsable de las cooperativas escolares. Quienes deberán adaptarse a los nuevos lineamientos, eliminando la venta de productos como refrescos y alimentos ultraprocesados. En su lugar, se incentivará la venta de productos locales y de temporada.
- Además, se planea emitir una estrategia de comunicación dirigida a maestros, directores, padres de familia y estudiantes, para impulsar hábitos alimenticios más sanos.
- Dentro de la Nueva Escuela Mexicana (NEM), se implementarán contenidos en los Libros de Texto Gratuitos para enseñar a los estudiantes sobre los beneficios de una alimentación saludable.
- La SEP también ofrecerá cursos y diplomados para docentes, con el fin de garantizar que estos nuevos hábitos alimenticios se arraiguen en las escuelas.
- Se promoverá la actividad física o práctica deportiva.
- También se implementará un sistema de seguimiento para evaluar los resultados del programa Vida Saludable, parte esencial de la nueva estrategia educativa.
Un futuro más saludable para las escuelas mexicanas
La prohibición de la venta de comida chatarra en las escuelas marca un paso decisivo hacia un México más saludable. A partir de marzo de 2025, las escuelas deberán implementar estas nuevas políticas, con la esperanza de reducir los altos índices de obesidad infantil y juvenil. Este es un esfuerzo conjunto entre la SEP y la Secretaría de Salud, quienes seguirán monitoreando y ajustando las medidas para garantizar un impacto positivo duradero en la salud de las nuevas generaciones.