Albergue “Cachorrilandia” salva a 200 perritos durante el huracán Beryl
En una carrera contra el tiempo, la asociación rescatista de animales “Cachorrilandia” se movilizó para proteger a más de 200 perros ante la amenaza del huracán Beryl.
Ubicados en un terreno de dos hectáreas rumbo a Leona Vicario, su refugio carecía de un albergue adecuado, obligándolos a buscar urgentemente un lugar seguro para los animales.
Días antes de la llegada de Beryl, comenzaron la búsqueda desesperada de un refugio temporal. Finalmente, horas antes del impacto del huracán, aseguraron una bodega en el fraccionamiento “Los Héroes” de Cancún, gracias a gestiones de último momento. Sin embargo, los desafíos continuaron cuando su camioneta se averió, complicando el traslado de los perros.
Albergue “Cachorrilandia” salva a 200 perritos
Con la intervención del gobierno estatal, que respondió enviando dos camionetas, lograron completar el traslado justo antes de que la tormenta azotara la región.
La operación se extendió hasta altas horas de la noche, enfrentando condiciones adversas como la falta de electricidad, lo cual perturbó a muchos de los perros que se encontraban fuera de su entorno habitual y asustados por la tormenta.
Yulidiana Lázaro Huérfano, fundadora de “Cachorrilandia”, relató que durante el traslado una perrita especialmente nerviosa llegó a morderla, incidente que ella restó importancia dado el estrés que todos estaban experimentando.
Ahora, con las lluvias persistentes y la amenaza de otra formación de baja presión, planean negociar con el dueño de la bodega para extender su estadía temporal y asegurar el bienestar de los animales.
El equipo de “Cachorrilandia” sigue comprometido con su misión de cuidar y proteger a los animales
El terreno que poseen en Leona Vicario ofrece espacio suficiente para un albergue adecuado, pero carecen de los fondos necesarios para construirlo.
Yulidiana explicó las dificultades adicionales que enfrentan como asociación registrada que aún no cuenta con la categoría de donataria, lo que les impide emitir recibos fiscales y dificulta la captación de fondos.
En medio de estas adversidades, el equipo de “Cachorrilandia” sigue comprometido con su misión de cuidar y proteger a los animales vulnerables de la región.
Su experiencia con el huracán Beryl subraya la importancia de la preparación y la solidaridad comunitaria en momentos de crisis, así como la necesidad continua de apoyo para poder ofrecer un refugio seguro y adecuado a los perros rescatados.
