El SMN prevé lluvias intensas y calor extremo que desafían a comunidades y autoridades


Mientras millones de personas en México enfrentan temperaturas sofocantes que superan los 45 grados en el noroeste del país, otros estados lidian con lluvias torrenciales que podrían provocar inundaciones, deslaves y afectaciones a la infraestructura.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el monzón mexicano, que se mantiene activo en el noroeste, seguirá generando precipitaciones fuertes a muy fuertes en entidades como Sonora, Chihuahua, Durango, Sinaloa y Nayarit. A esto se suma la presencia de canales de baja presión, una circulación ciclónica en niveles altos de la atmósfera y la entrada de humedad desde distintos océanos, lo que intensifica la actividad lluviosa en gran parte del territorio.
La situación es especialmente delicada en estados como San Luis Potosí, Jalisco, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Puebla, Guerrero, Oaxaca y Chiapas, donde se esperan lluvias puntuales muy fuertes que podrían elevar los niveles de ríos y arroyos, además de provocar encharcamientos y deslaves.
A pesar de las lluvias, el ambiente caluroso extremo persiste, sobre todo en Baja California, Sonora y Chihuahua, donde se prevén máximas superiores a 45 °C, mientras que otras regiones del norte, noreste y sureste alcanzarán entre 35 y 40 grados. Esta combinación de calor intenso y precipitaciones severas representa un reto para las comunidades rurales y urbanas, que deben prepararse tanto para posibles cortes de energía como para afectaciones a cultivos, viviendas y caminos.
Además, se pronostican rachas de viento de hasta 70 km/h, lo que podría derribar árboles, anuncios espectaculares y dañar estructuras frágiles. Las autoridades llaman a la población a extremar precauciones, atender las indicaciones de Protección Civil y mantenerse informada ante posibles alertas meteorológicas.
El SMN prevé lluvias intensas y calor extremo que desafían a comunidades y autoridades
El SMN advirtió que la onda tropical número 11 y la inestabilidad atmosférica mantendrán la probabilidad de tormentas eléctricas y granizo en varias regiones. Por su parte, la onda tropical número 10 ya se ha desplazado, dejando de influir en el clima del país.
Los especialistas recuerdan que estos fenómenos climáticos pueden intensificarse por efectos del cambio climático, por lo que la población debe mantenerse preparada y fomentar medidas de adaptación y prevención.
Autoridades locales y federales han reforzado la vigilancia en zonas de alto riesgo, mientras brigadas de rescate y auxilio permanecen alertas para atender cualquier emergencia.