Comunidades del país se preparan ante lluvias intensas y calor extremo: autoridades llaman a reforzar medidas de prevención


Mientras el monzón mexicano continúa impactando con fuerza el noroeste del territorio, autoridades estatales y municipales refuerzan operativos de monitoreo y alertamiento para hacer frente a lluvias muy fuertes que podrían provocar deslaves, inundaciones y cortes de energía en comunidades vulnerables.
De acuerdo con el pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se esperan precipitaciones intensas especialmente en Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango y Nayarit, mientras que en entidades como San Luis Potosí, Tamaulipas y Nuevo León una circulación ciclónica en altura podría detonar lluvias puntuales fuertes. En el centro y occidente del país, la interacción de canales de baja presión y la onda tropical número 10 propiciará tormentas en Michoacán, Colima, Jalisco, Guanajuato, Puebla, Guerrero y Oaxaca, entre otros.
Ante la posibilidad de incremento en niveles de ríos y arroyos, Protección Civil mantiene vigilancia permanente en zonas serranas y comunidades asentadas en laderas. “Pedimos a la población atender los avisos oficiales y, de ser necesario, trasladarse a refugios temporales habilitados”, señalaron autoridades de algunos municipios de Durango y Sinaloa.
En contraste, el calor extremo persiste en varios puntos del país. En zonas del noreste de Baja California y noroeste de Sonora, el termómetro podría superar los 45 °C, lo que representa un riesgo adicional para la población, sobre todo para adultos mayores y niños. Pese a que se prevé la finalización de la onda de calor a partir de hoy, el ambiente seguirá caluroso en la mayor parte del territorio.
Comunidades del país se preparan ante lluvias intensas y calor extremo: autoridades llaman a reforzar medidas de prevención
Especialistas recomiendan extremar precauciones por ráfagas de viento de hasta 70 km/h en costas del golfo de California, zonas del istmo de Tehuantepec y regiones montañosas del norte y noreste, donde podrían presentarse caídas de árboles y estructuras ligeras.
Mientras tanto, organizaciones comunitarias, ejidos y comités locales de vigilancia se coordinan con brigadas de auxilio para garantizar la seguridad de quienes viven en áreas de difícil acceso. “Las lluvias son una bendición, pero cuando vienen acompañadas de tormentas y granizo, es vital actuar con prevención”, comenta Teresa Martínez, habitante de una comunidad en la Sierra Tarahumara.
Los fenómenos meteorológicos de esta temporada recuerdan la urgencia de fortalecer la cultura de protección civil y de impulsar la infraestructura de drenaje y mitigación de riesgos, especialmente en comunidades rurales y urbanas expuestas a lluvias torrenciales.
Las autoridades invitan a consultar los canales oficiales de la Conagua y el SMN para conocer actualizaciones, y mantener medidas básicas como evitar cruzar ríos crecidos y asegurar techos, láminas y objetos que puedan desprenderse con los vientos fuertes.