Antigua enfermedad resiste antibióticos y se propaga mucho más rápido


La Chispa trae una noticia que demuestra que los científicos no se saben estar quietos y no siempre es bueno. Antigua enfermedad resiste antibióticos. Una enfermedad que alguna vez fue casi erradicada vuelve a cobrar fuerza, esta vez con un rostro más peligroso: la resistencia a los antibióticos. La fiebre tifoidea, causada por la bacteria Salmonella enterica serotipo Typhi (S. Typhi), está evolucionando rápidamente y se vuelve más difícil de tratar, amenazando con desatar una crisis de salud pública a escala global.
¿Qué es la fiebre tifoidea y por qué está regresando?
La fiebre tifoidea es una infección bacteriana grave que se transmite principalmente por agua y alimentos contaminados. A pesar de que en muchas regiones había sido controlada mediante vacunas y mejores condiciones sanitarias. Ahora regresa con una forma más resistente. Lo que alguna vez fue una enfermedad casi olvidada, hoy es una preocupación seria: antigua enfermedad resiste antibióticos y afecta especialmente a países con sistemas de salud más vulnerables.
La evolución de una amenaza: resistencia a los antibióticos
Durante las últimas décadas, la medicina moderna había relegado a la fiebre tifoidea a un lugar secundario en la lista de preocupaciones sanitarias. Sin embargo, nuevas investigaciones revelan que esta antigua enfermedad no solo ha regresado, sino que lo ha hecho con una capacidad renovada para eludir los tratamientos tradicionales.
Según un estudio publicado en The Lancet Microbe, la bacteria S. Typhi está desarrollando una resistencia alarmante a los antibióticos, incluyendo aquellos considerados de última línea. Esta evolución ha generado que incluso las terapias más avanzadas resulten ineficaces en muchos casos.
Impacto global y urgencia en la investigación
Jason Andrews, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Stanford y coautor del estudio, subrayó: “La rapidez con la que han surgido y se han propagado las cepas altamente resistentes de S. Typhi en los últimos años es motivo de verdadera preocupación”.
Este fenómeno no solo afecta a países en desarrollo. Si no se toman medidas urgentes, la propagación internacional de cepas resistentes podría desencadenar consecuencias globales. El avance de esta bacteria representa una amenaza que crece en silencio. De hecho, ya se han documentado casos en zonas urbanas donde el acceso a la atención médica es limitado, lo que incrementa su peligrosidad.
¿Qué podemos hacer frente a esta nueva amenaza?
Los expertos sugieren que la solución no está únicamente en desarrollar nuevos antibióticos. También es fundamental reforzar campañas de vacunación, mejorar los sistemas de saneamiento, y fomentar el uso responsable de antibióticos, tanto en humanos como en la industria alimentaria. En muchos sentidos, esta lucha recuerda a la resistencia antimicrobiana global que afecta también a otras bacterias como la Neisseria gonorrhoeae, la cual ha sido calificada como una “superbacteria” por la OMS.