Trump impone arancel del 125% a China por “falta de respeto” a los mercados globales


En un giro inesperado de la política internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump impone arancel del 125% a China, generando un terremoto financiero a nivel global. La medida fue anunciada como una respuesta directa a lo que el presidente estadounidense describió como una “falta de respeto” de China hacia los mercados internacionales. El movimiento ha sido catalogado por analistas como uno de los momentos más agresivos de la guerra comercial entre las dos potencias.
Trump impone arancel del 125% a China y sacude los mercados
El aumento arancelario ocurre luego de que Beijing impusiera un arancel del 85% en represalia por los gravámenes estadounidenses del 104% anunciados esta misma semana. En respuesta, Trump decidió intensificar la ofensiva comercial, señalando que “los días de estafar a Estados Unidos ya no son sostenibles ni aceptables”. Paralelamente, anunció una pausa de 90 días para más de 75 países, con aranceles reducidos del 10%, buscando fomentar negociaciones bilaterales.
Además, el mandatario afirmó que la suspensión entra en vigor de inmediato, en un intento por separar a los aliados de los rivales estratégicos como China. Esta acción es vista como una maniobra política para fortalecer su postura de “América primero”.
El impacto inmediato en los mercados globales
Las repercusiones de los aranceles de Trump no se hicieron esperar. La semana pasada las bolsas de valores de Nueva York, Frankfurt, Tokio y Hong Kong experimentaron pérdidas millonarias. Según Deutsche Bank, la decisión representa “el mayor golpe al sistema comercial global desde el colapso de Bretton Woods en 1971”. También marca el mayor aumento de impuestos al consumidor estadounidense desde la guerra de Vietnam.
Trump impone arancel del 125% a China tras respuesta de Pekín: ¿guerra comercial sin fin?
Luego de que el martes, la Casa Blanca anunció aranceles del 104 % a los productos chinos, en una muestra de fuerza, el gobierno chino reaccionó rápidamente con nuevos aranceles del 84% sobre productos estadounidenses, agudizando aún más la tensión entre las dos economías más grandes del mundo. El Ministerio de Comercio de China afirmó que la medida busca proteger su economía de las “acciones proteccionistas irresponsables” de Washington.
Los expertos advierten que esta espiral de represalias podría desencadenar un colapso en las cadenas de suministro globales y una desaceleración prolongada del comercio internacional.
¿Qué sectores son los más afectados?
El sector tecnológico, ya golpeado por las restricciones de exportación, enfrenta ahora mayores costos de importación. Empresas como Apple, Intel y Tesla verán afectadas sus cadenas de producción. Los automóviles ensamblados en China que se exportan a EE.UU. sufrirán un golpe directo, lo que podría incrementar sus precios hasta un 30%.
El sector agrícola estadounidense, que depende en gran medida del mercado chino, también enfrenta un panorama oscuro, con tarifas que dificultan la competitividad internacional.
¿Una nueva recesión a la vista?
Los economistas advierten que la combinación de aranceles, inflación y tensiones diplomáticas podría desembocar en una recesión global. El Fondo Monetario Internacional revisó a la baja sus proyecciones de crecimiento para 2025, en gran parte debido a la incertidumbre comercial impulsada por la administración Trump.
Para América Latina, las consecuencias podrían ser mixtas: por un lado, una posible redirección de inversiones, pero por otro, volatilidad en los mercados de materias primas.
¿Qué sigue para la economía mundial?
La decisión de que Trump impone arancel del 125% a China marca un punto de inflexión en las relaciones comerciales globales. La comunidad internacional observa con atención este conflicto, conscientes de que su desenlace podría redibujar las reglas del comercio internacional en los próximos años.