Vivos los llevaron: Comando Lacandones.

marzo 4, 2025

Sé debe decir con todas sus letras: los desaparecidos políticos que reclama la Organización Campesina Emiliano Zapata (OCEZ); de Chiapas, fueron vistos con vida en el Campo Militar número 1; entre 1974 y 1976.
Después, realmente desaparecieron de la faz de la tierra y lo último que se sabe de Francisco Javier Coutiño Gordillo y sus compañeros del Comando Lacandones, es que “los subieron a un camión militar”; los sacaron con rumbo desconocido, y jamás se volvió a saber de su suerte.
Los testimonios que dan fe de los hechos, son de los familiares de Lucio Cabañas Barrientos, entre ellos un hermano menor, de nombre Conrado Serafín Gervacio; quien convivió con ellos durante su secuestro; en el mismo lugar.
“Jugaban futbol con ellos”; cuenta David Cabañas Barrientos, o Alejandro Serafín Gervacio, como en realidad se llama este histórico revolucionario del Partido de los Pobres (PdlP).
Los diez familiares de Lucio Cabañas, entre ellos su madre, esposa y hermano, fueron liberados en 1976 y según cuenta David Cabañas; sacaron mensajes para los familiares de los Lacandones desaparecidos; pero no fue posible cumplir con ese propósito.
David Cabañas me entregó una relación de los Lacandones desaparecidos; vistos vivos en el Campo Militar número 1:
1.- Eduardo Villaburo Ibarra
2.- Hgildo Ortíz Herrera
3.- Javier Coutiño Gordillo
4.- Bartolomé Hernández
5.- Sebastián Vázquez Mendoza
6.- Andrés Gómez Balanzar
7.- Fidelino Martínez
8.- Justino
9.- Daniel Tapia Pérez
Hasta dónde se ha documentado, el Comando Lacandones (o Brigada Revolucionaria Lacandones) surgió en 1973 en Venustiano Carranza, Chiapas.
Sus fundadores fueron: Heriberto, Ismael y Reynol Díaz Coutiño.
Otros militantes eran Francisco Javier Coutiño Gordillo (Silvestre), Bartolomé Pérez Hernández y Sebastián Vázquez Mendoza.
Los tres participaron en el secuestro de Juvencio Flores Patiño y por ese hecho
fueron detenidos el 15 de noviembre de 1974 en la comunidad de San Andrés Actopan, Hidalgo, por agentes de la Policía Judicial del Estado.
El 18 de noviembre de 1974 los tres (y otros) fueron entregados a la Dirección Federal de Seguridad (DFS) y trasladados a la ciudad de México.
La DFS los habría entregado al Ejército y los habrían ingresado al Campo Militar número 1.
Los familiares de Lucio Cabañas los conocieron y establecieron relaciones de amistad y camaradería.
Hasta que un día los subieron a un camión militar y ya no se supo nada de ellos.
Los desaparecidos fueron víctimas de la llamada Guerra Sucia que enlutó al país en la década de los 70.