Para la derecha lo importante no es ganar…
Por José García Sánchez
La derecha sabe que no compite por ganar sino para perder menos, y no le va mal ante la situación que vive porque la inconformidad que podría captar un partido de oposición la absorbe como caño, y esa gente en lugar de votar por el desencanto que produce su candidata y sus propuestas preferirá no votar. Es decir, engrosar las filas del abstencionismo como protesta directa contra la oposición que no supo encausar dicha situación.
Los inconformes están tan descontentos con el gobierno como con la oposición y se expresarán al respecto. Aunque esa expresión sea el abstencionismo o la anulación de su voto.
Pero la oposición tiene ventajas en el abstencionismo porque mientras menor sea el número de votos emitidos los partidos que la integran tienen mayores posibilidades de conservar su registro, que sería la prioridad, ya ganar en las urnas es secundario para los partidos opositores, pero no así para sus patrocinadores que quieren el triunfo a como dé lugar, incluso a sangre y fuego.
Esta es la pugna dentro de la oposición: mientras a sus mecenas les interesa el triunfo electoral, por la vía que sea necesario, a los líderes de los partidos les interesa mantener el registro, el cual está en peligro en el caso de los tres.
Era necesario que la oposición recibiera el revés del rechazo y conozca las verdaderas causas de la derrota electoral para que se convierta en una fuerza más responsable, porque hasta ahora evitar responsabilizarse de su apatía y vocación por la delincuencia. Continuamente culpa al gobierno de su mala suerte con los mexicanos, a quienes no puede persuadir, culpa a MC de no unirse, de persecución política, etc.
La inmadurez de la actual oposición pareciera no entender que esquema que utilizó los últimos cinco años no es propio para México, corresponde a una política del pasado. Mostrar vulnerabilidad y decirse víctimas significa no responsabilizarse de sus actos, porque ninguno fue ingenuo al desconocer que cuando delinquían estaban violando la ley y ahora que son descubiertos se dicen el centro de los ataques del gobierno cuando saben perfectamente que actuaron contra la vida de los mexicanos no sólo por el cártel inmobiliario, sino en la supuesta guerra contra el narco, con la concesión a guarderías, con la intención de desestabilizar la estrategia de salud durante la pandemia, etc.
Todas esas consignas, acciones y omisiones de la oposición costaron vidas, en la gran mayoría de los casos fue por intereses particulares, por negocios sucios, por corrupción, de tal suerte que no pueden llamarse a sorpresa pero sí quieren sorprender a los mexicanos argumentando ser víctimas y no delincuentes comunes.
El principal aliado de la oposición en este momento es el abstencionismo y el principal enemigo sus patrocinadores, porque los obligarán a ser carne de cañón en una lucha por rescatar los privilegios, sin importar el destino de los partidos, que, bien que mal, todavía están conscientes de su vulnerabilidad frente a las elecciones.
A los mecenas de la oposición no les interesa sacrificar a sus partidos sin en el intento desaparecen. Ellos alquilan mercenarios en una guerra que quieren ganar no saber cuántos muertos hubo en cada frente. Por eso paga, por ganar guerras.