La nacionalización del ISSSE con austeridad republicana
Por José González
octubre 9, 2024
Desde la década de los ochenta, directivos del ISSSTE y dirigencias sindicales aglutinadas en la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), rechazaron la privatización del Instituto.
Sólo habrá que recordar que algunos estudios de laboratorio y de imagenología se realizaban en establecimientos privados por la sobre demanda de estos servicios, a través de un vale.
Muchos negocios, sobre todo en los estados de la República pertenecían a médicos adscritos alguna clínica, Hospital Regional o General, inclusive en el propio Centro Médico Nacional 20 de Noviembre.
Las subsecuentes administraciones en la década de los noventa comenzaron con la renta de equipo médico como tomógrafos, aparatos de resonancia magnética, para el servicio de radioterapia, electrocardiogramas y hasta monitores de signos vitales y equipos de laboratorio.
La voracidad de los proveedores entró hasta los quirófanos con los aparatos de anestesiología, materiales quirúrgicos de un solo uso, que en muchas ocasiones se reutilizan y no precisamente para economizar.
Así como la señora Amparo Casar logró una pensión vitalicia en PEMEX al fallecer su esposo de forma dudosa, algunas pensiones que se otorgaron y quizá aún se otorguen provienen del manejo de otros datos cuyos titulares ya abandonaron este plano.
Las hojas de registro para solicitar préstamos personales y créditos de vivienda se ofertaban al mejor postor con un profundo sentido electoral sobre todo en temporadas presidenciales.
Tanto los funcionarios provenientes de partidos llamados neoliberales y algunos dirigentes sindicales distraídos dejaron hacer y dejar pasar y, servidores públicos con sueldos de jefe de servicio o A-8 posteaban sus giras de placer en las redes sociales los recursos del ISSSTE para servicios y medicinas se agotaban.
Al tiempo se ventilaron las cadenas de conflictos de interés en la compra venta de medicamentos cuyos propietarios y/o socios disfrutaban de su hobby; aprobar leyes a modo. Los sobre precios y especulación terminaron por vaciar a las farmacias.
En el caso del sensible servicio de abasto de productos de primera necesidad como perecederos, abarrotes, enseres, ropa, artículos para la higiene personal y doméstica sucumbió ante las presiones de las grandes cadenas por el control de precios; el dumping.
Otro caso que llevo a la ruina al Sistema de Tiendas y Farmacias fue el robo hormiga, la falta de pago a proveedores durante muchos años, el desvío de recursos financieros, el desabasto, la compra al mayoreo a bajo precio para su venta a comercios privados.
A nivel nacional se registró la falta de mantenimiento de un alto porcentaje de los inmuebles con fugas de agua, drenajes deficientes, inundaciones, fallos en los sistemas informáticos; congelación de plazas con la constante violación a los registros de Bolsa de Trabajo.
A sus 64 años, el ISSSTE logró sobrevivir de una terapia intensiva gracias al esfuerzo y dedicación de sus trabajadores quienes requieren de una actualización salarial, jornadas de ocho horas para todas las categorías en todo el país.
La revisión de sus Condiciones Generales de Trabajo cuyas prestaciones están congeladas desde hace más de una década requieren una actualización urgente, así como de una mejor planeación de los recursos humanos.
El mejor balance de los servicios los tiene la derechohabiencia destinataria del presupuesto asignado al ISSSTE, entre los que se encuentran los cerca de 80 mil trabajadores del base de esa dependencia y sus familias.
En el saldo del recuento de los daños es prudente reconocer la intervención del gobierno federal para rescatar al ISSSTE de la bancarrota y de manos de privadas. Por ello fue necesario inyectar recursos adicionales para el abasto de medicamentos, contratación de personal y compra de dispositivos médicos propios.
El nuevo equipo de trabajo que encabeza el doctor Martí Batres tiene el gran reto de planificar mejor la inversión presupuestal, recaudar las cuotas y aportaciones pendientes de gobiernos estatales, dependencias y organismo descentralizados que reciben servicios para sus trabajadores.
Él y su equipo tienen a cuestas mejorar, actualizar y profesionalizar los servicios que reciben cerca de 14 millones de derechohabientes en todo el país.
En la quinta sesión de la Junta Directiva del ISSSTE se ratificó la urgencia de impulsar el segundo piso de la cuarta transformación del país, donde la justicia se extienda en todas direcciones, se continué con la erradicación de actos de corrupción y los beneficiarios reciban los servicios en tiempo y forma.
Existen muchos rezagos en la atención de primer nivel, en la zona de prevención y en la atención temprana de enfermedades metabólicas, cardiacas, ortopédicas, epidemiológicas, dentales y oftalmológicas, entre otras cuyos servicios de atención recurrente, de auxilio, sobresaturan las Clínicas de Medicina Familiar para obtener el famoso pase FM1-17 que los acerque a un especialista.
Los nuevos funcionarios, que anticipamos en esta columna, cuentan con experiencia política, de diálogo, en materia de seguridad social, administración médica, contable, jurídica, vivienda, pensiones y jubilaciones y alta capacidad de empatía con las personas vulnerables y sensibles, así lo evidencian sus cargos públicos y preparación académica.
La dirección Médica estará bajo la responsabilidad del doctor Gustavo Reyes Terán. En tanto que, José Rodríguez Ávila Carrasco fue nombrado director de Oficinas de Representación. Con estos nombramientos se asegura un contacto directo de la Institución con los beneficiarios.
En las tareas administrativas destacan Omar Butrón Fosado, quien asumió el cargo de director de Administración y Finanzas, quien será el responsable de la austeridad republicana y la gestión eficiente de los recursos del ISSSTE, un aspecto crucial para el funcionamiento del organismo y la atención a los servicios que ofrece.
Por su parte, Juan Gerardo López Hernández es el nuevo director de Prestaciones Económicas, Sociales y Culturales, quien buscará mejorar las condiciones y beneficios que el instituto otorga a sus afiliados.
La licenciada Rocío del Pilar Villarauz Martínez, es la directora Estratégica de Información, Supervisión y Evaluación, quien tendrá la tarea de implementar las políticas que aseguren la calidad de los servicios y el correcto seguimiento de los mismos.
A la quinta sesión de la Junta Directiva asistieron el Maestro Marath Baruch Bolaños López, secretario del Trabajo y Previsión Social; el maestro Zoé Robledo Aburto, director del IMSS; la doctora Raquel Buenrostro Sánchez, secretaria de la Función Pública, así como el doctor Ramiro López Elizalde, Subsecretario de Salud.
Por la parte sindical, hicieron acto de presencia Joel Ayala Almeida presidente del CEN de la FSTSE, Alfonso Cepeda Salas, secretario general del SNTE, y la presidenta del CEN del SNTISSSTE, doctora Norma Liliana Rodríguez Arguelles.
