LA CUARTA KAKISTOCRACIA
Aquellos que se vanaglorian aun de observar los destrozos de la mal llamada Cuarta putrefacción, perdón, Transformación, en realidad son una clase diferente a los hombres y mujeres que hemos venido construyendo con nuestro esfuerzo y tesón el país del que hasta ahora me enorgullezco, porque al menos hemos conservado la esencia de aquellos hombres y mujeres que dieron la vida por defender los ideales del país y de esta Patria.
La Real Academia Española considera “caquistocracia” como una grafía mas adecuada en español, término utilizado en el análisis y crítica política para designar a un gobierno por los más ineptos, los más incompetentes, los menos calificados, y los más cínicos, de un determinado grupo social. Y eso ha sido el mal llamado Movimiento de Regeneración Nacional, porque hasta ahora no ha regenerado nada, y todo lo que ha hecho no es más que una simple tarea de destrucción, para que presuntamente de las cenizas vuelvan a nacer.
No cabe duda que cuando la estupidez se extravía pensando que alcanzó la grandeza, es el momento en que los pueblos encuentran el camino como le ha venido ocurriendo a la Nación Mexicana, que se alejó de sus raíces para caer en las garras de una sarta de aventureros encabezados por Andrés Manuel López Obrador, y cuyos resultados han sido desastrosos por no decir letales para la vida pública de este aún maravilloso país.
Y si, el Movimiento de Regeneración Nacional que ha presumido ser la cuarta transformación de la vida nacional, no es más que una caterva de ignorantes y ladrones que por un accidente de la historia alcanzaron el poder. Y lo digo con todas sus letras, el peor mandatario de la historia del país es Andrés Manuel López Obrador, porque simplemente alcanzaron la cifra más alta de la historia en el conteo de muertos por no reconocer desde el inicio el riesgo que se dejaba venir con la pandemia del COVID.
Esa enfermedad altamente viral que minimizó Andrés Manuel López Obrador, y quien tiene la culpa de la muerte de miles de mexicanos cuando señalaba que no pasaría nada porque con el “detente” de un estampa religiosa era suficiente para que todos se aliviaran, y el resultado de esta pésima estupidez del asesino de Palenque provocó la muerte de miles de mexicanos, y para decirlo más claro, murieron muchos más mexicanos que en la Revolución Mexicana.
Que bueno que los mexicanos hayan abierto los ojos ante lo que ha venido ocurriendo, pero que malo que hasta ahora las y los mexicanos han entendido el engaño en que los metió Andrés Manuel López Obrador, y el daño que le hizo al país. Que se hayan robado todo lo que podían, es grave, pero que el propio Mandatario siga señalando que su gobierno ha sido uno de los más transparentes no es más que una vil mentira, por aquello de que el tabasqueño piensa que una mentira repetida cien veces termina por convertirse en una irrefutable verdad, pero los pueblos no son idiotas, los idiotas son los que encabezan los engaños. Cárcel a López Obrador¡! Al tiempo.
