El llamado

Por: Francisco Reséndiz
La presidenta Claudia Sheinbaum -me dicen en la casa presidencial- no va a dejar pasar una más. En los últimos dos días, ha lanzado mensajes duros y dejado claro que nadie, absolutamente nadie, puede romper con el discurso que tras una lucha histórica ha llevado al lopezobradorismo a conducir el destino del país: “por el bien de todos, primero los pobres”.
Y sí, luego de que cuatro de sus principales operadores en la arena nacional, miembros clave en su equipo, han sido sorprendidos en Roma, Madrid, Lisboa y Tokio y otro más vive su más grave crisis de credibilidad, la Presidenta de México salió domingo y lunes a lanzar una batería de mensajes.
“En política no hay coincidencias”, dice el clásico. Y la presidente Sheinbaum aprovechó su gira del domingo por Tlalpan, el primer bastión que gobernó y desde donde construyó el camino para ser Jefa de Gobierno y luego Presidenta de la República, para lanzar una serie de dardos que -me aseguran- pegaron fuerte en la cúpula morenista.
En una parte de su mensaje, frente a la jefa de gobierno de la CDMX, Clara Marina Brugada, soltó:
– A nosotros no se nos olvida de dónde venimos, porque quien se olvida de dónde viene no sabe a dónde va, se olvida su camino.
– Nosotros llegamos al gobierno, porque tenemos causas y tenemos principios. Y no se nos olvida que somos un gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo de México.
– Tenemos principios y tenemos causas, la primera: por el bien de todos primero los pobres.
– No puede haber gobierno rico con pueblo pobre.
– No queremos corrupción en los gobiernos, el recurso del pueblo es del pueblo de México. – Los gobernantes debemos vivir en la justa medianía, como decía Juárez.
– Nada de aquellos gobernantes que se cuidaban con guaruras, que nunca estaban cerca de la gente, que vivían encerrados en sus oficinas; nosotros somos gobierno de territorio y siempre con el pueblo, siempre con la gente.
– Y el recurso público jamás debe ir a los bolsillos de un gobernante, eso se acabó.
– Con el pueblo, todo; sin el pueblo nada.
Pero los señalamientos no quedaron ahí. Liderazgos morenistas, consultados ayer, me dicen que en el partido tomaron nota de inmediato del mensaje que lanzó la Presidenta, pero que no solo eso, que este menaje se ha replicado a cuadros y militancia. Pero Sheinbaum no dejó suelto el tema.
Sabe de la importancia de no romper el discurso y ayer, sin dar nombres, lanzó otra andanada de obuses desde Palacio Nacional, durante su conferencia de prensa matutina… sí, a pregunta de los reporteros:
– Como lo he dicho siempre y lo voy a seguir diciendo: el poder se ejerce con humildad. Esa es mi posición y siempre va a ser, siempre.
– La gente tiene derecho a visitar uno u otro país, pero nosotros tenemos una responsabilidad política y una responsabilidad que tiene que ver con el movimiento al que representamos y los principios que representamos.
– No puede haber gobierno rico con pueblo pobre.
– Entonces, todos tenemos que, en el momento que estamos desempeñando un cargo público, comportarnos adecuadamente.
– Siempre el poder debe ejercerse con humildad, siempre, esa es mi posición y siempre va a ser.
– Cada quien tiene que ser reconocido por su historia, por su comportamiento, siempre.
En la cúpula morenista tienen claro que la actuación de algunos de sus principales cuadros puede descarrilar la narrativa que ha construido y defendido la 4T. Incluso en gobiernos estatales que, me aseguran, han comenzado a encender luces amarillas, por la actuación tan pobre de sus nuevos y nuevas gobernadoras.
Mientras, el mensaje de la Presidenta ha sido recibido.
RADAR
¿CAMBIOS? Por cierto, el diputado Alfonso Ramírez Cuéllar -vicecoordinador de Morena en San Lázaro y quien ha disputado en liderazgo de la bancada a Ricardo Monreal- se reunió con la presidenta Sheinbaum en Palacio Nacional y el viernes publicó una fotografía que desató un tsunami al interior del grupo parlamentario.
Ayer, el zacatecano -paisano de Monreal, por cierto- hizo un par de declaraciones en las que sostuvo que en Morena hay unidad y estabilidad, descartó un relevo al frente de la bancada y sostuvo que Monreal tiene todo su respeto y respaldo al frente de los diputados federales morenistas.
Agregó que en la bancada hay tranquilidad y no se pretende cambiar la organización interna, por lo que la coordinación goza de estabilidad con Monreal Ávila. Ramírez Cuéllar insistió en que continuará con sus funciones como vicecoordinador del Grupo Parlamentario de Morena, por lo que no pretende asumir el liderazgo de la bancada.
“No sé Rick, suena falso”, diría el meme.