Leyendo ahora
Comité Noruego dinamitó Premio Nobel de la Paz

Comité Noruego dinamitó Premio Nobel de la Paz

Tremendo y comprometedor regalo recibió María Corina Machado Parisca con el Premio Nobel de la Paz tres días después de su cumpleaños, el 10 de octubre pasado.

 

De madrugada, al desenvolver el obsequio admiró una jugosa manzana, la sabroseó y le dio tremendo mordisco. Al abrir los ojos miró que era una bomba expansionista con dinamita.

 

A las cinco de la mañana, en el quinto sueño escuchó el timbre de su móvil, era una llamada de número desconocido de alguna telefónica noruega. Quizá dudo en contestar.

 

Sin embargo, en el video que capturó los audios de la llamada, que circula en las redes. En los diálogos se aprecia nerviosismo, silencios y voces entrecortadas; quizá sobre actuación.

 

“Operación Encuentren al Premio Nobel de la Paz”

¡Eureka! …

Tomó el móvil y respondió a la pregunta Kristian Berg: “¿Hablo con María Corina Machado?” … preguntó.

 

Respondió: “Sí, soy María Corina Machado” …

 

Con tropezones verbales se presentó el de la voz desde Oslo, Noruega:

“Soy Kristian Berg Harpviken, secretario del Instituto Nobel Noruego y llamo para informarle que en breve se anunciará que usted recibirá el Premio Nobel de la Paz 2025”.

 

“Oh my Good” … hay qué nervios… María agradeció la nominación a nombre de sus seguidores venezolanos… en un acto de falsa modestia…

 

Se sabía que María Corina andaba a salto de mata en la clandestinidad de alguna parte, escondida por los rincones de la vista de Nicolás Maduro, indiciada como traidora a la patria.

 

“Sólo soy una persona… que ciertamente no lo merezco” … Oh my Good, espero que entienda que esto es un movimiento, un logro de toda una sociedad”, se escuchó en una grabación.

 

Minutos después, ya sin el pijama dedicó el Nobel de la Paz – “inmerecido”- a su pueblo venezolano y a su partner, el ojo alegre Donal Trump, quien aún no digería la noticia.

 

A sus recién cumplidos 58 años el pasado 7 de octubre pareciera no comprender las dimensiones de su nominación al tiempo de ofrendarla al gringo loco. Extraña manera.

 

El Servicio de Inteligencia Noruego (NIS), hizo bien la “vueltica venezolana”. Sólo la familia de María Corina Machado Parisca conocía sus escondites, vaya ni Nicolás Maduro.

 

El proyectil Nobel de la Paz lleva cuenta regresiva y en su momento alguien lo detonará cuya expansión alcanzará a varios territorios apetecibles del sionismo gringo.

 

En México, sólo en la militancia de derecha y ultraderecha género jubilo, sobre todo de aquellos que ofrecieron su trasero para que lo besara el Tío Sam… ¿y la UNAM?…

 

Alguien del Instituto Nobel Noruego no comprendió la lectura del testamento o se tomó la licencia y aprovechó el premio para darle una ayudadita a los fachos venecos.

 

Haiga sido como haiga sido, el desprestigio del famoso premio Nobel cayó más hondo que el dólar en la depresión del jueves 24 y martes 29 “negros “de octubre de 1929.

 

Como jarrón chino por los aires, el Nobel se jodió en mil pedazos

Aquí los promotores de Corina Machado, diseñadores de que el galardón capítulo por la Paz, ya devaluado, se otorgaría a la venezolana desde el año pasado; ellos son:

 

Marco Rubio, Secretario de Estado de los EE.UU.; los Congresistas Republicanos, María Elvira Salazar y Mario Díaz-Balart y el Senador Republicano Rick Scott.

 

Lo anterior de acuerdo a la publicación de un documento membretado y firmado por republicanos, en el portal de Facebook, “La Suprema Definición”.

Con estos vecinos para que sumar enemigos

Destaca también una misiva de petición en apoyo a María Corina Machado firmada por 120 personajes chilenos entre ellos José Rodríguez Elizondo, escritor y analista político.

 

La mayoría de los firmantes tienen una postura ideológica de centro derecha, más cargados hacia la derecha, inclusive algunos inclinados al gobierno de Pinochet.

 

Eh aquí extractos de la epístola chilena: “el liderazgo de María Corina Machado hoy trasciende las fronteras de su país…

 

“Se ha convertido en un faro de luz y esperanza para los millones de seres humanos que luchan por la libertad, la paz y la democracia en naciones bajo regímenes opresivos.

 

“Desde la clandestinidad, con su vida en peligro constante, ha develado la difícil situación del pueblo venezolano y también ha galvanizado el apoyo internacional con base en los movimientos democráticos del mundo”, se menciona en la misiva.

 

En el cuento de hadas diseñado desde el gobierno Trumpista o por algún apéndice fáctico sionista se pirateó y operativizó “El Arte de la Guerra” del chino Sun Tzu.

 

El Nobel se convirtió en una discreta invasión, en una guerra multidimensional que va más allá del simple combate físico.

 

En el eventual despojo de hidrocarburos, de minas de oro, tierras raras, venezolanas van implícitas la inteligencia, la psicología y la manipulación de la información en modo Sun Tzu.

 

La idea del estratega chino es vencer sin luchar, pero, dónde queda el negocio de las armas, el dominio aplastante de la “dinamita” convertida en arma letal de la que se arrepintió Alfred.

 

La “dinamita” que se utilizó como explosivo en minas, granadas, torpedos y proyectiles de artillería en su tiempo se convirtió en el arma predilecta de anarquistas, saboteadores y revolucionarios.

 

Hoy, el explosivo tiene fines amables en la minería, construcción y uno de sus compuestos, la nitroglicerina, para uso médico y el testamento de Nobel, en arma expansionista.

Casi siempre, en el pecado se lleva la penitencia, reza refrán

Sucedió que, en casa del herrero, azadón de palo: Alfredo Nobel en su decadencia sufrió de angina de pecho y le medicaron nitroglicerina para aliviar su afectado sistema circulatorio.

 

Lo mejor de su hallazgo es que la nitroglicerina actúa como un preparado que relaja los vasos sanguíneos, mejorando el flujo de sangre al corazón y aliviando el dolor en el pecho.

 

Recupero el tema de Sun Tzu y sus los cinco pilares fundamentales del arte de la guerra. Son la estrategia diseñada en la doctrina, el tiempo, el terreno, el liderazgo y la disciplina.

 

El Nobel regional se convirtió oficialmente en una guerra multidimensional para tratar de incrustar el neoliberalismo en la apetecida Venezuela de los Machados-Trumpistas.

 

Todavía falta ver cómo se define la correlación de fuerzas en América Latina y cómo reaccionarán los mercados, las bolsas de valores y los otros frentes del globo planetario.

 

Es indudable que la violencia estallará por algún lado y las eventuales alianzas están a la espera donde China, la Unión Soviética y nacionales afines se opondrán al expansionismo sionista-gabacho.

 

La guerra mediática está en la balanza donde las balas de la post verdad son tan efectivas como persista la desinformación y la ignorancia de quienes se ofrecen al villano D. Trump.

 

María Corina Machado tiene en sus manos el detonador de la dinamita

De indiciada por alta traición a la Patria brincó como gotas de agua en comal aceitoso al Premio Nobel de la Paz con sus declaraciones incendiarias y con alto contenido de violencia.

 

Desde 2001, al menos se conoce en los medios que la Novel premiada a través de la Organización Civil Voluntaria, “Súmate” a cargo de Alejandro Plaz, recibió apoyo gabacho.

 

Plaz cocreó “Súmate”, un grupo de profesionales como ingenieros y técnicos enfocados en resultados concretos y en una democracia efectiva.

 

Alejandro Plaz y María Corina Machado Parisca, como miembros de Súmate, fueron imputados por traición y conspiración al recibir una donación de 31 mil dólares de la Fundación Nacional para la Democracia.

Ver también

 

“La organización estadounidense, fundada en 1983, a iniciativa del Congreso, financia proyectos que promuevan la democracia liberal en el mundo”, de acuerdo el New York Times.

 

Esta es la organización, no gubernamental, está dedicada a la promoción de la democracia en el mundo a pesar de recibir protección del Partido Republicano de Trump.

 

La Fundación sólo se interesa en conservar y aumentar su bienestar comercial, en los temas de exportación e importación; la democracia les vale un pepino.

 

Los sionistas estadunidenses codician los recursos naturales venezolanos, las vías de comunicación, asegurar el bisne, de las personas no les interesa si viven o mueren.

 

El caso de traición a la patria venezolana cometida por Corina Machado, debidamente fundada y motivada, está en pausa por la injerencia de Human Rights Watch y de grupos pro democracia.

 

Sin embargo, la novel dirigente reconoció en su momento “las cosas positivas que se han hecho” en Venezuela cuando gobernó el desaparecido Hugo Chávez al que calificó de “intolerante”.

 

Casualmente la intolerancia de Chávez impidió la invasión y el despojo de los recursos petroleros, de las minas de oro, de plazas turísticas y al establecimiento de una base naval gringa.

 

Sus patrocinadores reconocen que Machado, con el apoyo del gobierno de Estados Unidos, logró unificar a la oposición, desafiar al régimen y activar una lucha democrática desde el exilio, la cárcel y la tortura, sin legitimar sus dichos.

 

Su causa siempre ha sido acercarse al poder a través de elecciones que ha perdido ella misma y con sus candidatos presidenciales en su país.

 

Fue candidata presidencial en las primarias opositoras de 2012, en las que alcanzó el tercer lugar con el 3.81 por ciento del total de los votos.

 

De un largo historial político siempre a favor del intervencionismo gringo, hoy pide a gritos una intervención militar sin importar que se masacre a hombres, mujeres, y niños, en su propio país.

 

Pareciera la contra parte de Netanyahu sólo porque no está de acuerdo con el gobierno de Maduro y como le cae mal caprichosamente intenta dar un golpe de Estado.

 

Está vez el Premio Nobel, otorgado inmerecidamente porque en realidad ella nunca ha realizado algo en favor de la paz en ninguna parte del mundo.

 

Ese premio se otorgó por cuestiones políticas y no por merecimiento. En el fondo, está la intención de intervenir al país con las mayores reservas petroleras, de gas del mundo.

 

En realidad, a Trump no le importa el Chavismo, ni Maduro, menos el pueblo venezolano, lo que le importa es el petróleo, el oro, ese es su objetivo y va por eso.

 

Claramente el Nobel es la anunciación de una intervención que ya se creó, donde la Machado, es el detonador y quien dinamite a su propio país.

 

La motivación de Alfredo Nobel para crear el Premio Nobel de la Paz fue doble: por un lado, un sentimiento de culpa por sus inventos bélicos, como la dinamita que generó muertes.

 

Por otro lado, se cuenta que, influenciado por la activista por la paz Bertha von Suttner, Nobel usó su fortuna para recompensar a quienes contribuyeran de manera positiva a la humanidad, especialmente en la búsqueda de la paz mundial.

 

¿Dónde están los méritos de Corina Machado en favor de la paz mundial?

Y bueno parece que desde el más allá Alfred Nobel hoy más que nunca, a través de la Machado Parisca se recalca con mayor intensidad el mote de “comerciante de la muerte”.

 

Los cinco integrantes del Comité del Instituto Nobel de Noruega llevarán en su conciencia haber dinamitado al Premio Nobel de la Paz, que de por sí poco lustre ha dado a la humanidad.

 

En tanto, María Corina Machado Parisca recibirá una bolsa de 11 millones de coronas suecas, por ahí de 1,17 millones de dólares; 21 millones 756 mil 033 pesos mexicanos.
The Nobel Prize and gone with the wind…

 

 


© 2024 Grupo Transmedia La Chispa. Todos los derechos reservados

Subir