Claudia, mismas promesas de AMLO
Arturo Ríos Ruiz
Al llegar al poder, AMLO prometió que acabaría con la corrupción y la impunidad; primero los pobres; se instauraría y mantendría un “auténtico Estado de Derecho”; y haría que los precios de las gasolinas bajaran, entre otras cien promesas vertidas por el nuevo presidente.
A un año de la culminación de su mandato, las cifras referentes a si ha cumplido o no con sus ofrecimientos, son diversas, aunque la mayoría coincide que no resolvió buena parte de ellas. Él ha expresado que culminó 98.
Hay un detalle muy importante que no dio a conocer en aquel momento el 2018 al tomar posesión, que se entiende, que lo mantenía en su mente: ejercer la venganza con todos aquellos que no lo apoyaron o, que estaban en contra y el primer golpe fue dividir la sociedad. Quedará marcado para la posteridad.
Creó los epítetos de “Fifí” contra sus seguidores, que el vulgo bautizó como “Chairos”, que convirtieron las redes sociales en batallas campales y hasta amenazas y las ofensas en lenguaje soez, hasta que las plataformas las omitieron y ahora las burlan sustituyendo letras con número que se entienden bien.
A lo largo del sexenio la estrategia de la división social, le funcionó en un principio, al convertirse en una distracción general; todo mundo peleando como desahogo personal y, con pronunciamientos baladíes. Él, el presidente, lanza improperios o ideas locas y así alimenta la distracción que le convine.
AMLO trazó un plan a largo plazo, para la sucesión y con demasiada antelación delineó a la idónea Claudia Sheinbaum como su ariete, la más entregada sin pudor de exhibirse como un mal espejo de él.
La corroboración lo leímos ayer: Claudia en Nayarit, anunció aumento al salario mínimo, como lo hizo su mentor; frenar los incrementos de la energía eléctrica y por si fuera poco, ofreció la consolidación de políticas y acciones para la honestidad, la dignidad. Le faltó, ataque a la corrupción como lo hizo AMLO.
La dama, tiene todas las facilidades de triunfo, la oposición se pasmó, un PAN endeble con Marko Cortés que no avanza, el de más electores; un PRD, en manos corrompidas, las de ”Los Chuchos” y un PRI, que lo entierra el mismo “Alito”, rey de la traición que lo desmantela.
Alejandro Moreno, acaba de confirmar, lo que ya era un hecho; expulsó a Osorio Chong y a Claudia Ruiz Measseau, que ya está desde antes en el MC de Dante Delgado y a otros cuatro más. Clara estrategia rapaz, para enterrar al organismo otrora el más poderoso y acelera con ello de una vez su final.
Con esa medida, “Alito” Moreno, debilita a la Coalición, Va por México, que en 2021, trastocó seriamente a Morena, cuando le arrebató más de la mitad de la Ciudad de México y algunos estados y surgió la idea de mantener esa alianza que ofrecía que podía avanzar. Hoy, ya no es igual.